Recordar aquello de lo que el tiempo te convenció, para después recorrer a trompicones las vías del desconcierto. Retirarse las legañas de la inmadurez a tortazos, buscarse en manías huecas y encontrarse perdida en la gravedad de mis impulsos.
La realidad, entra a bocanadas en mis pulmones, mientras que mi cuerpo bombea las inseguridades de la certeza.
Te deshiciste en momentos aparentemente tenues que yo me encargué de velar.
Te entretuviste con las ganas del momento, con los lazos que unen las noches fugaces.El mutismo, hoy juega un papel muy importante, y es que mi indiferencia motiva tus sin ganas de mi.
Tiempo al tiempo.
Que pase lo que tenga que pasar.
ResponderEliminarÉxito.